sábado, 18 de abril de 2015

La factoría Disney

Cada vez se hace más necesario, formar personas libre-pensadoras y con sentido crítico, capaces de seleccionar la información que reciben, y distinguir la que más se ajusta a la realidad. Los estereotipos y prejuicios, surgen como un modo de simplificar la realidad, de hacerla más manejable. Es necesario y de vital importancia, que los docentes, sean conscientes de sus propios prejuicios con el fin de no servir de vehículo de transmisión a sus alumnos, que sean capaces de mediar y facilitar el proceso de enseñanza-aprendizaje y coherentes a la hora de respetar las decisiones tomadas por sus alumnos, en base a su autonomía e independencia, basada en el desarrollo de su pensamiento crítico.
En todo proceso de comunicación dos o más personas intercambian puntos de vista, emociones o informaciones y quienes establecen una relación autoritaria están poniendo en práctica su concepción jerárquica de la interacción humana.
El poder aliado de la comunicación, la importancia de estar apoyado por un sector en lo mediático, da razón a los diferentes grupos de poder que están al abrigo de los diarios, semanarios, revistas de divulgación, y por supuesto en el control de la web, esta gran tela de araña que entre todos podemos tejer y que las autoridades de todos los países quieren llegar a controlar, para favorecer la alienación de sus conciudadanos, esta idea que en 1945 rondaba la cabeza de Walt Disney sigue fresca incluso hoy. Pero acaso un mayor control, un refugio incluso con leyes propias como es el caso de Celebration, en Florida, no es un lugar menos libre, desde luego no es nada democrático, es más bien una monarquía, por no llegar a llamarlo una dictadura, donde todo lo que puede ser bueno lo decida otros por nuestra bien llamada libertad, donde se nos clasifique desde nuestro nacimiento por nuestra dotación genética, o por factores económicos…
La educación debe ser compensadora y enriquecedora, integral. Cuántas leyes educativas distintas llevamos en los últimos quince años, y siguen, seguiremos sin atender a la compensación, a intentar lograr el máximo exponencial de las personas atendiendo a nuestras capacidades, y tachándonos de libertarios, pero cerrando accesos a todos los que no cumplan unos requisitos, la educación de calidad es la que favorece a todos por igual, la que da oportunidades, la que invierte en educación a sabiendas de que el futuro depende en gran medida de las actuaciones de hoy, a sabiendas de que la investigación y el desarrollo del mañana depende de los estudiantes de hoy, y que el desarrollo de un estado, pasa inexcusablemente por el estado de sus ciudadanos, qué camino estamos sembrando hoy, y qué podremos ser capaces de recoger cuando lleguemos a la meta y veamos que con estas tasas de paro, de desarrollo educativo, de investigación, de cultura, de convergencia en la norma, sin dar oportunidad a lo creativo, a lo artístico, a lo crítico, se han podido ir rellenando los agujeros que hemos ido creando, verdaderas zanjas por las que no podremos caminar ni nosotros, ni generaciones futuras.
La educación como el motor del cambio social, la cultura colaborativa, y el desarrollo de espacios y foros de conversación, la búsqueda de soluciones creativas, las medidas de apoyo a la investigación y el desarrollo, la calidad educativa que permita que los universitarios tengan la mejor formación, para poder ser los mejores investigadores, la facilidad de acceso a otros lugares y culturas por medio de programas de intercambios, tantas y tantas cosas que se estaban trabajando y que ahora parece que tiende a desaparecer o al menos a no “democratizarse”.

BIBLIOGRAFÍA:
  • Aparici, R. “La reinvención de la comunicación” 2006 https://didacticaeducomunicacion.wordpress.com/.../educacion-para-los- medios/
  • Dorfman, A y Mattelart, A. “Para leer al Pato Donald (Siglo XXI)”.1972.  
  • Ferguson, R. “Los medios bajo sospecha”. (Gedisa, 2007)
  • Giroux, H.A. (2001) “El ratoncito feroz. Disney  o el fin de la inocencia”. Madrid. Fundación Germán Sánchez Ruipérez.
  • Youtube “Mickey Mouse goes to Haiti”. Documental. 1996

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